Gestión de Talento es uno de los temas más recurrentes en HR. Es un conjunto de procesos de HR integrados entre sí, conectado con todas las áreas clave de la organización, desde contrataciones, evaluación de desempeño y retención. El propósito de la gestión de talentos es aumentar el desempeño a través de una estrategia que busca atraer, desarrollar, motivar y retener a los mejores candidatos y colaboradores. ¿Cómo podemos atraer a las mejores personas? ¿Qué tenemos que hacer para ganar la guerra de los talentos?
Una Estrategia de Gestión de Talento tiene 5 objetivos principales:
1. Descubrir el talento, fuera y dentro de la empresa.
2. Utilizar el talento adecuadamente, ubicándolo en el puesto adecuado.
3. Motivar y retener el talento
4. Crear nuevos talentos
5. Adaptar la organización al talento de sus miembros, para que éstos puedan seguir expresando y aumentando su talento.
Para lograr estos objetivos existen muchos temas en los que hay que enfocarse especialmente:
1.Employer Branding: se trata de crear y difundir una marca potente para atraer talentos.
2.Reclutamiento: es necesario diseñar un proceso de reclutamiento que sea único, que se diferencie, destacando los atractivos reales de la empresa (no se deben generar falsas expectativas).
3.Selección: Detectar y seleccionar lo mejor es una parte crítica de la gestión de talento. No es fácil distinguir entre los candidatos, quién lo hará mejor, por eso, es necesario apoyarse en buenas entrevistas, simulación de casos y muy especialmente en todo aquello que permita anticipar el grado de calce cultural del candidato con la organización. No solo es importante elegir al candidato, sino que el candidato elija la empresa, tal como es, con su cultura y dinámicas.
4.Referencias: El talento reconoce al talento. Los programas de referencias son muy efectivos, porque son los mismos miembros de la organización quienes recomiendan candidatos con los que ya han trabajado o trabajan para puestos vacantes.
5.Onboarding: Permitir que los nuevos empleados se puedan convertir en miembros productivos de la organización lo más rápido y fluido posible.
6.Plan de sucesión: Debes ser capaz de llenar los puestos cruciales cada vez que quedan vacantes, tener un “talent pipeline” (grupo de talentos identificados) que asegure el plan de sucesión es un elemento clave en esto, porque buscar talento únicamente cuando lo necesitamos no es una buena opción, sobretodo si queremos reducir tiempos y costos de contratación.
7.Aprendizaje y Desarrollo: Esto no es sólo una práctica común de gestión de talento, sino que es además una práctica indispensable. Entre otros muchos beneficios, capacitar y desarrollar a los colaboradores ayuda a aumentar el desempeño y la retención. Después de todo, una vez que hayas reclutado a las mejores personas, vas a querer asegurarte de que puedan desarrollar sus talentos de la mejor manera, en beneficio de la organización.
8.Gestión de Desempeño: Una parte esencial de la gestión de talento es mejorar y hacer seguimiento de dicho desempeño. La manera más utilizada son las evaluaciones de desempeño, pero no todas logran su objetivo. Es importante que sean simples, con foco en el feedback permanente y que permitan acordar y hacer seguimiento a planes de mejora.
Si consideras que son muchos ámbitos a los cuales prestar atención, parte por lo básico, identificando quiénes son aquellas personas de tu organización que ya sea por su experiencia, conocimientos o potencial, son un talento. Si no sabes cómo, pregúntanos!